sábado, 27 de agosto de 2011

Educando a Tarzán (5)




NUEVAS TECNOLOGÍAS APLICADAS A LA EDUCACIÓN


La época de las lluvias estaba resultando este año más larga de lo habitual.  Chita conseguía soportar la monotonía de aquellas tardes lluviosas, encerrada en el refugio, hojeando los libritos del "Selecciones del Reader Digest" que Jane conservaba para no perder del todo el recuerdo de tiempos anteriores.


Se detuvo distraída en aquel reportaje que anunciaba la aparición de una nueva máquina de enseñanza que, al parecer, se estaba experimentando con éxito en una High School de Minesota y que, con toda seguridad, iba a resultar imprescindible en cualquier centro educativo del futuro.


Dio un manotazo para espantarse los mosquitos que, en estas tardes de lluvia resultaban especialmente molestos y dijo, mirando a Tarzán con gesto melancólico:


- No te dejes engañar, Tarzán, hijo: ahora y siempre, el único material didáctico imprescindible para dar clase es la cabeza.  Aunque, hombre, también es verdad que siempre puede ayudar el tener algo que decir.


Y es que las tardes de lluvia la ponían especialmente filosófica.

3 comentarios:

Luis Ángel Díez Lazo dijo...

Se ve que la lluvia le sienta bien a Chita. Su razonamiento es perfecto, pero se le olvida que además de tener algo que decir, es imprescindible alguien con ganas y necesidad de escuchar.
Salud.

Luis Ángel Díez Lazo dijo...

Bienvenido, otra vez al hervidero de ideas on line.
Se te echaba de menos.

Francisco Flecha dijo...

Amigo Luis Ángel: Tendré que volver a poner el del viejo profesor aquel que decía a sus alumnas distraidas aquello de "señoritas, no les pido amor, pero, al menos un poco de atención al acto"
Saludos