Con permiso de Favelis
.
1.
Aunque pobre, tenía un corazón de oro. De todos modos esto no fue suficiente aval para que el banco le concediera un crédito personal.
2.
Decía que sabía imitar a los pájaros como nadie lo había hecho. Pero nadie le creyó. Por eso, una tarde rompió con todo y salió volando
.
10 comentarios:
No diré en público los motivos, pero sí diré que hoy, leyéndote, me he emocionado.
Gracias
Estimado Pancho, sus textos (iculos) confirman que sin alegría, confianza y determinación es imposible sobrevivir en este planeta.
Saludos.
Amigo anónimo. Como los textos son pequeñitos, me imagino que la emoción también habrá sido pequeñita.
Saludos afectuosos
Amigo Carlos: con alegría, confianza y determinación también cuesta un poco
Saludos
Geniales!
Me encantó lo del pájaro! Quién pudiera...
Cariños
Gracias, Quillen. Salir volando es un privilegio que sólo consiguen algunos.
Saludos
Quizá todos llevamos interiormente un pajarillo y un corazón de oro.
Seguramente tienes razón.
Saludos
En pocas palabras: me encantan los microrrelatos.
Gracias Borja; pero ya me parece, incluso, largo el comentario.
Saludos
Publicar un comentario